ML Correduria te ofrece el Seguro de Responsabilidad Civil para la Protección de Datos Personales que te proporcionará protección financiera, asistencia legal especializada y servicios de consultoría de comunicación para disminuir los daños al prestigio, tanto de la empresa como de las personas claves de la organización.
Todas las empresas tratan datos de carácter personal, ya sean de sus propios empleados, de sus clientes o de potenciales consumidores.
No solo el nombre y los apellidos son datos considerados como personales, sino que existe otra mucha información que permite identificar a las personas y que puede ser considerada dentro de la categoría de datos personales, como es el caso de fotografías o imágenes, la voz, la huella digital, la dirección postal o de correo electrónico, la fecha de nacimiento o combinaciones numéricas como el número de teléfono, el de la Seguridad Social, el de identidad (DNI) o el de identificación fiscal (NIF), etc. Todo ello sin contar con aquellos datos especialmente protegidos por ley como son los relativos al origen racial, la salud o la vida sexual o que revelen la ideología, religión, creencias o afiliación sindical de la persona.
En la actualidad, las empresas deben desenvolverse en un entorno altamente exigente en materia de protección de datos personales. Las empresas deben tomar una actitud cada vez más vigilante ante nuevas y mayores obligaciones a las que se debe dar escrupuloso cumplimiento y ante el riesgo de incurrir en responsabilidades por infracciones que adicionalmente pueden dar lugar a inspecciones de autoridades administrativas, cuyo fin es velar por el cumplimiento normativo y que pueden llegar a imponer sanciones administrativas, que dependiendo de su gravedad, pueden oscilar entre 60.000€ y 600.000 €.
Más allá del impacto económico de posibles indemnizaciones por daños y perjuicios o sanciones a las que deba hacer frente una empresa, una infracción del uso confidencial de datos de carácter personal puede dañar seriamente uno de los valores más preciados de la empresa, su reputación, con el consecuente desgaste de su imagen y la posible pérdida de clientes u oportunidades de negocio.
UN ENTORNO CAMBIANTE
En España se ha regulado con más detalle la protección de datos personales con la aparición en enero de 2008 del Reglamento de Protección de Datos, que amplía las normas vigentes desde la aparición de la Ley Orgánica 15/1999 del 13 de diciembre de Protección de Datos de Carácter Personal, también conocida por sus siglas LOPD.
Las autoridades legislativas españolas y de gran parte del extranjero han reaccionado rápidamente para establecer un estándar mínimo de protección al ciudadano:
